Cambrai, 1595

Cambrai en 1649

Debilitada por una serie de guerras de religión, Francia con Enrique IV estaba mal equipada para hacer frente a la poderosa amenaza española en su frontera con los Países Bajos. En varios movimientos rápidos y decisivos, los españoles capturaron la fortaleza francesa de Cambrai en 1595, seguida pronto por Calais y la importante fortaleza estratégica de Amiens.

El 14 de agosto, el conde de Fuentes se presentó ante las murallas de Cambrai al frente de 10.000 infantes, 3.000 jinetes y cerca de 80 piezas de artillería. Los defensores, al mando de Jean de Montluc, sumaban 3.000 infantes, 300 jinetes, 55 cañones y casi 7.000 paisanos armados. El miedo al saqueo si la plaza era tomada al asalto hizo que el 2 de octubre se negociara la rendición, que se hizo efectiva el 9 del mismo mes.

Durante el asedio fueron acuñadas piezas de 20, 10, 5, 2 y 1 patards, en bronce y en cobre. Existen numerosas reacuñaciones en plata, cobre, papel y cuero. Algunos autores consideran que estas últimas, en cuero, fueron acuñadas en los últimos momentos del sitio. También existen opiniones en el sentido de que comenzaron las acuñaciones en plata y, al faltar dicho metal, se sustituyó por el cobre, llegando a realizarse piezas en cuero y en cartón.

No parecen, pues, estar suficientemente documentadas las acuñaciones de este asedio, por lo que las piezas que se presentan pueden ser originales o reacuñaciones.

Se conoce un resello, sobre monedas de plata, que es atribuido también a la época del asedio.